miércoles, 29 de febrero de 2012

NADA. Desató la polémica y fue censurada. Hoy, es un éxito.

Escrito con palabras sencillas y frases cortas. Con una sintaxis clara.
Podría ser unos de esos relatos para leer rápidamente, sobre todo porque la edición está muy cuidada y la letra es muy cómoda.
Pero el lector se lleva una agradable sorpresa desde el punto de vista de que es imposible leerlo a la velocidad de rayo porque con cada frase se abre una ventana hacia el interior y el exterior de uno mismo. Se comienza a mirar y observar a la gente desde otra perspectiva…
Plantea un tema que hace tiempo no se planteaba en los libros para jóvenes o quizá en los libros en general. Un tema que no busca la inmediatez en la respuesta sino la reflexión.
Cuestiona el modelo de sociedad actual desde el punto de vista de un adolescente que descubre la dualidad del mundo a través del estilo de vida familiar.
El desengaño de los adolescentes obligados a plantearse temas profundos sobre la construcción de su vida, su madurez, el rol que desea tener en la sociedad y el que esa misma sociedad le impone. Pero para ello necesitan más herramientas de las que disponen. La sociedad, los sistemas de enseñanza cada vez les dan menos posibilidades de prepararse para tomar decisiones. Aunque a simple vista cada vez se tiene mayor acceso al conocimiento, al parecer cada vez somos menos capaces de ayudar a los jóvenes a crecer y desarrollar plenamente sus capacidades, a controlar y fortalecer sus emociones, a aceptar y transformar sus debilidades en fortalezas.
El planteamiento del protagonista sobre la vida, hace que esa incertidumbre caiga como fina lluvia o como proyectiles de peras sobre sus compañeros de clase que sienten tambalear sus certezas, y se plantean demostrar a su colega que no tiene la razón. Pero intentar demostrar a nivel general lo personal, lo humano y lo divino, las certezas del camino y las aberraciones consentidas, puede ser otra manera de disfrazar la realidad.
Lo que comienza como una necesidad de autoafirmación, se va convirtiendo en pequeñas vendettas, en crueldad, en histeria, y traspasa, arrasando, los valores básicos que creían tener claros. Todo es posible ante la necesidad de demostrar que estamos en un mundo que sí importa. Todo es válido para no admitir la equivocación o la desgana, la desilusión. El miedo es otro de los protagonistas de esta historia que por momentos pone los pelos de punta al lector, no porque su contenido sea de alto voltaje sino porque la inocencia de la crueldad es la peor de las verdades. La incapacidad de asumir la libertad como un derecho dentro del grupo; el peso de la palabra dada, el dolor de la humillación y la impotencia ante el desarraigo.
Un libro que no necesita de cuatrocientas páginas para contar una historia. Una escritora que domina el oficio y plantea los temas con claridad y sin abusar de los adjetivos ni de las sensiblerías.
Un libro que vale la pena leer en los tiempos que corren porque sacude la mente, cuestiona las verdades absolutas y las bases de la sociedad actual. Una lectura propicia para el debate y la tertulia.
 Autora: Janne Teller  (Dinamarca)
Editorial: seix Barral
Público: juvenil y pensantes en general.

martes, 28 de febrero de 2012

UNESCO lanza en internet la Biblioteca Digital Mundial

UNESCO lanza en internet la Biblioteca Digital Mundial 

Podríamos decir que estamos de parabienes, la UNESCO ha abierto una biblioteca en la que podemos entrar a cualquier hora del día. Os invito a visitarla y a comentar si es silenciosa o necesita de más actividades en la sala infantil, o de un rincón para leer el periódico...
Además la noticia no aclara si UNESCO es un o una bibliotecaria, si lleva gafas, si acaba de recibirse, si su opción por los libros es vocacional o no hay tal pasión, si disfruta con su trabajo. Nada. Quizá sea mejor así, porque cada uno puede imaginársela a su manera. 
Me gusta la idea de que haya una biblioteca mundial, pero quién nos va a guiar entre los libros para que entendamos los tejuelos; dónde está la sonrisa que nos recibe y nos informa; en qué silla se sienta Juan o María. Cómo voy a conocer a esa persona especial que sabe tanto de células madre...
¿Estamos cada vez más solos?
Es una lástima que en este tipo de biblioteca no pueda uno encontrarse a los intrépidos fantasmas de los edificios antiguos que velan por las palabras impresas. 
De todas maneras, es una muy buena iniciativa, ¿o no?

sábado, 25 de febrero de 2012

Soy lectora

Soy una forofa de los libros. Me gusta su olor, la sensación del papel entre mis dedos; el olor a tinta y a pegamento. Me gustan los libros como objetos de arte cada vez más sofisticados; sostener al mejor detective del mundo entre mis manos, perseguir a la asesina entre páginas que parecen no tener fin, acompasar mi ritmo cardíaco a las brazadas de un náufrago en medio del océano. Sensaciones eternas, amorosas, furiosas, incontenibles, todas las emociones humanas las he ido descubriendo entre los libros.
Soy una defensora feroz de los libros. Creo que las versiones impresas jamás serán sustituidas por las electrónicas, pero también creo que el mundo evoluciona, que la sociedad va camino a una nueva etapa y que es justo que cada quien pueda elegir dónde y cómo leer.
Por eso estoy escribiendo estas líneas, porque entiendo que más importante que el continente es el contenido y que si el continente se vuelve cada vez menos accesible, el contenido no puede quedar perdido, inerte, desorientado o abandonado en un cajón. O tal vez amontonado en una mesa de saldos. Creo en el poder de la palabra, en la fidelidad de los lectores, en las enormes cantidades de amigos de los libros que no pueden acceder a ellos por problemas económicos, sociales o culturales; porque en algunos casos los libros ya ni siquiera podrán encontrar su lugar en las bibliotecas.  No porque no deseen ser parte de ellas sino porque no hay presupuesto para adquirirlos.
Por eso, porque defiendo la libertad de leer dónde, cómo y cuándo se le antoje al lector,  porque soy consecuente con la sociedad que estamos formando, porque no puedo tapar el sol con un dedo ni negarme a la evidencia. Por todas estas razones y algunas más que no voy a enumerar en este momento, es que apoyo y me vuelco en la edición digital. Tengo el respaldo de ser una forofa de los libros, de su olor a tinta recién impresa, de ser fiel defensora de la palabra oral y escrita.  Porque ante todo y todos declaro abiertamente  que Soy lectora, reivindico mi derecho a decidir la manera en que quiero acceder a la lectura. 

lunes, 13 de febrero de 2012

Fallece el editor Germán Sánchez Ruipérez.

A los 85 años de edad, fallece en República Dominicana quien fuera inspiración de muchos, entre ellos quien os escribe. Estaba estudiando para Experta en Literatura Infantil y Juvenil cuando tomé contacto con la Fundación que lleva su nombre. Algo prendió muy dentro de mí y supe desde ese momento que lo que había sido un hobby, se transformaría en el eje de mi vida. Amo la lectura, los libros, y estudio día a día la manera más sencilla, eficaz y universal de aficionar a la lectura. Ahora, a seguir el camino que tanto Don Germán Sánchez Ruipérez como tantos otros, nos han ayudado a caminar.

Fallece Germán Sánchez Ruipérez